No luches por el amor perfecto de tus sueños, lucha por aquel que sin ser perfecto te hace soñar y ver lo linda que es la vida.
La persona que más te quiere no es aquella que te llama, te mira, o está cerca de ti, es aquella que mirando al cielo le pide a Dios por ti, que te cuida, te proteja y que jamás permite que sufras.
Que tu felicidad no dependa del tiempo, pues cambia.
Que tu felicidad no dependa del dinero, pues se esfuma
Que tu felicidad no dependa de las emociones pues nos traicionan
Que tu felicidad no dependa de las personas pues somos imperfectos
Que tu felicidad dependa de Dios quien no cambia, no se esfuma, no nos traiciona, es fiel, es perfecto, y te ama como nadie te amará jamás.
Que disfrutes de tu tiempo y espacio en armonía y plenitud.
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