En el paralelo entre la labor del artesano y la construcción diaria que cada uno de nosotros realiza de la propia historia, se juegan elementos comunes a la creación, al arte de plasmar proyectos y deseos. En la tarea utilizaremos habilidades y fortalezas que nos permitirán diseñar, modificar, reconstruir, superar las dificultades.
Cuando elegimos los hilos interiores para crear la mejor obra de arte que es nuestra propia VIDA, nos transformaremos en Tejedores.
Así iremos tejiendo vínculos, relaciones, experiencias. Entrelazaremos afectos, desataremos tristezas, enhebraremos momentos felices, aumentaremos puntos para abrir los brazos y cobijar a otros….
Buscamos las fibras fuertes y coloridas: el amor, la alegría, la decisión, la esperanza para entretejer la trama que nos irá abrigando a lo largo del camino.
Los hilos se extenderán, se unirán a otras redes, alguna vez se cortarán y deberemos optar por soltarlos o volverlos a enlazar. Encontraremos nuevos ovillos, lograremos diferentes matices, trenzaremos filamentos cuando necesitemos fortalecer y aflojaremos tensiones en épocas más serenas.
Habrá momentos en que aparecerán nudos y se hará difícil continuar la labor. Entonces recurriremos a herramientas facilitadoras: la tolerancia, la paciencia, la constancia, la energía que contribuirán a la continuidad del trabajo.
Como artesanos cambiaremos la actitud de acuerdo a la edad. En la juventud tejeremos sin descanso, le pondremos color, originalidad, espontaneidad. En la mediana edad iremos perfeccionando la obra, le agregaremos detalles, valorizaremos cada punto y si somos generosos, compartiremos con otros el placer de seguir hilando cada día. Cuando lleguen los tiempos de la madurez, la cosecha de la vida, los Tejedores no dejaremos de trabajar, nos tomaremos más tiempo para contemplar la obra, nos transformaremos en maestros para los otros y si hemos aprendido, con humildad transmitiremos enseñanzas para que quienes nos sigan se equivoquen menos que nosotros.
Somos Tejedores de Vida, artesanos de nuestra historia, creadores generosos de un abrigo para nuevas generaciones, alumnos permanentes para aprender hasta el último día el arte de tejer amor con alegría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario